Más de 30.000 griegos salen a la calle para recordar el accidente ferroviario de 2023
Más de 30.000 personas según la policía se manifestaron este miércoles en toda Grecia para conmemorar el accidente de tren de hace un año que mató a 57 personas y puso al descubierto los graves problemas del sistema ferroviario.
En Atenas, algunos de los más de 20.000 manifestantes lanzaron cócteles molotov frente al Parlamento y la policía respondió con gases lacrimógenos, indicó un reportero de AFP.
También se inscribieron en rojo cerca del Parlamento los nombres de las 57 personas muertas el 28 de febrero de 2023 en la colisión más mortífera de la historia del país.
En Tesalónica, la segunda ciudad, también hubo incidentes en las manifestaciones que reunieron a 10.000 personas, según la policía.
El principal sindicato del sector público, ADEDY, hizo un llamamiento a la huelga y casi todos los transportes estarán parados durante 24 horas.
En el lugar del accidente, en el valle de Tempé (centro), más de mil personas, entre ellas familiares, supervivientes y rescatistas, se concentraron para recordar a las víctimas.
El 28 de febrero de 2023, antes de la medianoche, un tren de pasajeros que iba de Atenas a Tesalónica chocó frontalmente contra un convoy de mercancías.
Durante los 19 minutos previos al accidente, los dos trenes, uno de los cuales transportaba a más de 350 pasajeros, circularon por la misma vía sin que se activara ningún sistema de alarma.
"Hoy es un día de dolor. Para todos nosotros, el tiempo se detuvo el 28 de febrero de 2023, un día maldito, un agujero negro en el tiempo", dijo Antonis Psaropoulos, padre de Marthi, de 19 años, fallecido en el accidente.
El primer ministro conservador, Kyriakos Mitsotaki, reconoció en un comunicado el "fracaso colectivo" por las graves y múltiples negligencias en la red ferroviaria griega y prometió que los culpables serían castigados.
Por el momento 34 trabajadores ferroviarios están siendo procesados y dos de ellos se encuentran en prisión preventiva por "homicidio negligente".
A pesar de los millones asignados por el gobierno, la red ferroviaria griega sufre retrasos en la modernización de los sistemas automatizados de seguridad y la gestión del tráfico.
(C.Fournier--LPdF)