Sesenta zimbabuenses muertos por elefantes este año
Sesenta zimbabuenses murieron víctimas de los elefantes en lo que va de año, ya que el éxito de la conservación de los paquidermos provocó un aumento de los conflictos con los humanos, declaró el martes el portavoz del gobierno.
Con 100.000 elefantes, Zimbabue tiene la segunda población más grande del mundo, después de Botsuana, y aproximadamente una cuarta parte de los elefantes de todo África.
A diferencia de lo que ocurre en gran parte del planeta, donde los cazadores furtivos matan a los animales por sus colmillos, la población de elefantes de Zimbabue está creciendo a un ritmo de 5% anual.
"En algunas zonas, los elefantes se mueven en numerosas manadas y devoran todo lo que hay en los campos. Ahora inclusive se están adentrando en las zonas de viviendas, lo que obliga a los miembros de la comunidad a tomar represalias, hiriendo a algunos de los elefantes", dijo el portavoz del gobierno Nick Mangwana en Twitter.
"Los animales heridos se volvieron agresivos e incontrolables", precisó. "El tema del conflicto entre humanos y la fauna salvaje se convirtió en algo muy violento. Sólo este año 60 zimbabuenses han perdido la vida debido a los elefantes y 50 resultaron heridos", agregó.
Mangwana indicó que los elefantes habían matado a 72 personas en 2021.
Los elefantes vagan en Zimbabue fuera de las extensas reservas. El crecimiento demográfico y la pobreza también están obligando a los habitantes de las zonas rurales a trasladarse a zonas que les hacen entrar en conflicto con los paquidermos.
Tinashe Farawo, de la autoridad de gestión de Parques y Vida silvestre, advirtió a AFP sobre un posible "desastre" si no se reduce el número de elefantes. "Es probable que la amenaza aumente a medida que nos acercamos a la estación seca, cuando las manadas se desplazan en busca de agua y comida", subrayó.
Farawo afirmó que se desplegaron guardas forestales para abatir a los elefantes más peligrosos.
Los conservacionistas afirman que Zimbabue puede albergar a unos 45.000 elefantes, que necesitan vastos terrenos para pastar.
El comercio de elefantes está prohibido internacionalmente, pero el gobierno empieza a considerar la posibilidad de utilizar anticonceptivos o licencias de caza para gestionar la manada.
(V.Blanchet--LPdF)