Rescatistas buscan supervivientes tras el sismo en Vanuatu y rebajan a nueve los muertos
Los equipos de rescate buscaban el miércoles supervivientes que pudieron haber quedado atrapados en edificios desplomados tras el potente sismo que impactó Vanuatu, pequeña isla en el Pacífico, donde las autoridades cuentan nueve fallecidos en una revisión a la baja del último balance.
Hay "nueve muertos confirmados por el hospital Central Vila", informó el último balance divulgado por la oficina nacional de manejo de desastres y agregó que el número podría aumentar.
No obstante, este último reporte redujo a la baja el número de víctimas, estimado en el reporte previo en 14 fallecidos, según indicó la misma oficina administrativa el martes.
Ante el grito de tres personas vivas bajo los escombros de una tienda de tres plantas que colapsó en Port Vila, decenas de policías, médicos, socorristas y voluntarios intentaron a contrarreloj retirar los escombros, explicó a la AFP el residente Michael Thompson, contactado por teléfono satelital.
Cuando los rescatistas guardaban silencio, podían escuchar a los tres supervivientes. "Sacamos a tres personas que estaban atrapadas. Desafortunadamente, uno de ellos no lo logró", dijo Thompson.
Unas 80 personas, entre policías, médicos, rescatistas y voluntarios, utilizaron excavadoras, martillos neumáticos y sierras de hormigón, "todo lo que pudimos conseguir" para sacarlos vivos, agregó la fuente.
El terremoto de magnitud 7,3 sacudió la isla principal de Vanuatu a las 12:47 hora local (0147 GMT) del martes.
Las autoridades declararon siete días de estado de emergencia "debido al severo impacto" del sismo. La medida incluye un toque de queda de las 18H00 a las 06H00.
La sacudida provocó el derrumbe del edificio donde estaban las embajadas de Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda, según imágenes de AFPTV.
Los funcionarios de las embajadas de Estados Unidos y Francia están a salvo, indicaron ambos países. La misión estadounidense cerró su sede hasta nuevo aviso. Francia dijo que su oficina quedó "destruida".
Desde la primera sacudida, varias réplicas han golpeado este archipiélago de baja altura con unos 320.000 habitantes que figura como uno de los países más expuestos del mundo a sufrir desastres naturales.
Su ubicación en el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de intensa actividad sísmica y volcánica, lo hace propenso a sufrir terremotos.
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios estimó que unas 116.000 personas pueden verse afectadas por los peores impactos del terremoto.
(C.Fontaine--LPdF)