Los relatos de supervivientes de tragedias fascinan en el AFI Fest de Hollywood
El uruguayo Gustavo Zerbino y el marfileño Mamadou Kouassi tienen dos cosas importantes en común: ambos sobrevivieron a terribles experiencias que marcaron sus vidas.
Zerbino soportó 72 días en las altas nieves de Los Andes comiendo carne de familiares y amigos fallecidos para sobrevivir tras un infame accidente aéreo; Mamadou sufrió un brutal encarcelamiento, la extorsión y la esclavitud en la angustiante odisea de los inmigrantes africanos antes de llegar en balsa a Europa.
Hoy ambos son inspiración para destacadas películas que se presentan en el AFI Fest de Hollywood esta semana, antes de competir en los premios Óscar en 2024.
Zerbino recibió una gran ovación en Los Ángeles tras la proyección de "La sociedad de la nieve", postulación oficial de España a los Premios de la Academia y que se podrá ver desde enero en Netflix, su productora.
"Esta película te permite contactar con lo más profundo de tu alma y sentir exactamente el espíritu que teníamos en las montañas", dijo emocionado Zerbino sobre la cinta, basada en el libro homónimo del uruguayo Pablo Vierci.
El film retrata el llamado "Milagro de los Andes", cuando un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya que transportaba a un equipo aficionado de rugby y sus allegados se estrelló en las montañas durante su viaje para competir en Chile en octubre de 1972.
De los 45 ocupantes del avión, 33 sobrevivieron al impacto inicial y apenas 16 quedaron vivos tras diez semanas en un glaciar andino sin comida, refugio ni abrigo para afrontar temperaturas de -30° C a una altitud de 3.600 metros.
Los supervivientes tuvieron que recurrir a comer la carne de sus familiares y camaradas muertos para seguir vivos. Quienes no lo hicieron perecieron.
Esta historia ya había sido llevada al cine. La última vez fue en 1993 con la estadounidense "¡Viven!", protagonizada por un joven Ethan Hawke y dirigida por Frank Marshall.
La nueva versión, del director español Juan Antonio Bayona -"Un monstruo viene a verme" (2016) y "Jurassic World: el reino caído (2018)"-, cuenta jóvenes actores uruguayos y argentinos y pone el énfasis en el grupo, no solo en los supervivientes.
"En los Andes necesitábamos construir una sociedad solidaria, en la que todo era de todos y el único objetivo era sobrevivir", recalcó Zerbino en declaraciones a la AFP. Él, entonces con 18 años, fue uno de los dos que bajó a pie las montañas en busca de la ayuda que los salvó.
"No nos peléabamos entre nosotros porque estábamos peleando contra la muerte", señaló luego de la proyección de presentación.
- Esclavo en Libia -
"Io Capitano" ("Yo Capitán"), la candidata oficial de Italia al Óscar para mejor película internacional, tuvo su premier en Norteamérica el sábado y se estrenará en los cines de España y Estados Unidos en enero próximo.
El director Matteo Garrone, más conocido por el drama sobre la mafia "Gomorra" (2008), cuenta la desgarradora historia de los inmigrantes africanos antes de su llegada incluso a los peligrosos cruces del Mediterráneo que ocupan la mayoría de los titulares en medios occidentales.
Su guión combina las duras experiencias de la vida real de tres inmigrantes que escapaban de la guerra y las hambrunas, entre ellos Mamadou, que cruzó el Sahara hacia Europa desde Costa de Marfil.
"Pasamos aproximadamente un mes atravesando el desierto. Puedes ver a la gente morir delante de ti, a los niños morir por falta de agua. Y no los puedes ayudar", relató a la AFP antes de la proyección en Los Angeles.
Incluso cuando dejaron atrás ese tramo y llegaron a Libia, un importante país de tránsito y punto de cruce para migrantes, su terrible experiencia estaba lejos de terminar.
"A nosotros, los negros, nos atrapaban y nos encarcelaban", dijo el marfileño de 40 años, hoy radicado en Italia.
Una vez entre rejas, "te pedían que llamaras a algún familiar o pariente para que trajera dinero para pagar tu libertad. En ese momento yo no tenía a nadie".
La película exhibe escenas explícitas de tortura. Kouassi recuerda a otros reclusos "asesinados en la prisión, en las celdas".
Escapó sólo después de ser vendido "como esclavo" a un lugareño que necesitaba trabajadores para obras de albañilería en su propiedad y que finalmente lo liberó.
- "Amor, amistad, solidaridad" -
A pesar del trauma de revivir sus terribles experiencias, ambos hombres están ayudando a promover estas películas y expresaron su esperanza de que el público se lleve mensajes importantes.
Para Zerbino, su historia "no es una tragedia aunque tiene mucha tragedia; no es un milagro, aunque tiene muchos milagros".
Es en cambio, "una historia de amor, amistad, solidaridad... un mensaje muy importante en este momento difícil que enfrenta el mundo entero".
Kouassi espera que su película pueda ayudar a "la gente a comprender lo que enfrentamos antes de llegar a Europa".
Incluso, desea que conduzca a una flexibilización de las restricciones de viaje para las personas de los países más pobres que arriesgan sus vidas con cruces ilegales y peligrosos. "Es un completo desastre", afirmó.
(F.Moulin--LPdF)