Azarenka-Rybakina, primera semifinal femenina en Australia, donde Khachanov espera rival
Dos campeonas de Grand Slam, la kazaja Elena Rybakina y la bielorrusa Victoria Azarenka, se batirán por un puesto en la final del Abierto de Australia, donde el ruso Karen Khachanov espera contendiente tras eliminar al estadounidense Sebastian Korda, que abandonó por lesión.
Diez años después de ganar su segundo torneo en Melbourne (2012, 2013), una renacida Azarenka, número 24 del mundo, volvió a clasificarse para las semifinales de este Grand Slam tras superar sólidamente a su amiga Jessica Pegula (N. 3) por 6-4, 6-1.
Aunque la estadounidense de 28 años llegaba en muy buen momento de forma, sin haber cedido un solo set en Melbourne y con solo una derrota en 2023, la bielorrusa la neutralizó con duros y profundos golpeos desde el fondo de la pista, poniéndose rápidamente con 3-0 a favor.
Pegula resistió, consiguió salvar seis pelotas de break en el cuarto juego y le devolvió el quiebre para servir con 5-4. Pero la bielorrusa rompió de inmediato y se llevó un largo primer set de 64 minutos. Menos duró el segundo, apenas 33, en el que Pegula terminó lanzando la toalla.
Azarenka, una de las mejores restadoras del torneo, se enfrentará a la mejor sacadora, la kazaja nacida en Rusia Rybakina (N. 25), que eliminó en octavos a la número uno del mundo, la polaca Iga Swiatek, y en cuartos destrozó desde el servicio a la letona Jelena Ostapenko (N. 17).
Con una doble ruptura, Rybakina se llevó el primer set, que quedó interrumpido un rato por la lluvia. Y aunque cedió los dos primeros juegos del segundo set, encadenó cuatro seguidos y mantuvo la ventaja hasta cerrar el partido con su undécimo saque directo.
El servicio "es mi arma en la pista", dijo Rybakina que, tras ganar el último torneo en Wimbledon, se ve capacitada para más. "Ya lo he conseguido una vez y, por supuesto, tengo más confianza de que puedo volver a hacerlo", afirmó.
- Una lesión aparta a Korda -
También con un implacable saque, Khachanov (N. 20) consiguió su segundo pase consecutivo a unas semifinales de Grand Slam, después del Abierto de Estados Unidos, donde cayó ante el noruego Casper Ruud.
"Creo que las primeras semifinales del Abierto de Estados Unidos me dieron un impulso extra y un extra de confianza para demostrar quién soy realmente", dijo después en rueda de prensa.
En su caso, la clasificación se precipitó por la retirada por lesión del joven estadounidense Sebastian Korda (N. 31), que se había convertido en una de las sensaciones del torneo al derrotar en tercera ronda al finalista de las dos últimas ediciones, el ruso Daniil Medvedev.
"Obviamente no era esta la forma como quería terminar el encuentro", dijo el ruso de 26 años, que dominaba el partido por 7-6 (7/5), 6-3, 3-0 cuando el estadounidense de 22 años decidió retirarse.
El hijo del tenista checo Petr Korda, ganador de este Grand Slam en 1998 ante el chileno Marcelo Ríos, empezó el encuentro cediendo los siete primeros puntos y concediendo un break a Khachanov.
Pero cuando éste servía para cerrar el set, Korda aprovechó una caída en la eficacia de sus saques para devolverle la ruptura y llevar la manga al tie-break, donde el ruso aprovechó su tercera pelota de set con un revés paralelo inalcanzable.
La pelea duró poco más. Con 3-2 a favor en el segundo set, Korda pidió atención médica por molestias en la muñeca derecha y al volver con un vendaje ya no pudo ganar ningún juego más antes de lanzar la toalla.
Según explicó después, la molestia apareció a comienzos del segundo set. "Devolví una pelota de derecha y, después de esto, era incluso difícil sostener la raqueta", explicó.
Khachanov se enfrentará al joven checo Jiri Lehecka o al griego Stefanos Tsitsipas (N. 4) que, con tres semifinales en Australia a sus espaldas, parece el máximo rival de un Novak Djokovic, quien en la víspera desplegó un tenis magistral para entrar a cuartos de final.
(N.Lambert--LPdF)