Le Pays De France - Mac Neil hace historia panamericana para Canadá con cinco oros

La organización de la justa continental le reservó un espacio central en los carteles publicitarios, junto a otras estrellas globales como Rebeca Andrade o Marileidy Paulino, y la nadadora sobrepasó las expectativas hasta ser candidata a atleta más ganadora cuando termine el evento.

El miércoles, en el cierre de la natación en la capital chilena, subió con sus inseparables lentes de pasta a lo más alto del podio tras la final de los 4x100m combinados.

Con ese quinto triunfo, la campeona olímpica hacía historia panamericana para su país en el Centro Acuático de Santiago, donde también sumó una plata y un bronce.

Solo un atleta canadiense, Willie Weiler, ganó más medallas (ocho) en una edición de Panamericanos, en 1963, pero ninguno llegó antes a cinco oros.

"Realmente no sabía cuál era el récord", aseguró después ante la prensa. "Obviamente el oro en los 100m mariposa era un objetivo para mí, pero más allá de eso, solo quería dar las batallas".

Antes del miércoles, Mac Neil había ganado las pruebas individuales de 100m libres y 100m mariposa, fijando en ambas nuevos récords panamericanos, y en los 50m libres, así como en el relevo 4x100 libres femeninos.

La colección se completó con una plata (4x100 combinados mixtos) y un bronce (4x100 libres mixtos).

- Compromiso con Canadá -

A diferencia de otra estrellas de la pujante natación canadiense, como la adolescente Summer McIntosh, Mac Neil dio el paso de alistarse para los Panamericanos, un evento que siguió con pasión cuando se realizó en Toronto en 2015.

En Santiago, la canadiense ha sonreído más que nunca junto a sus compañeras siendo clave para que su país saltara en el medallero desde el cuarto lugar de Lima-2019 hasta el segundo, con un total de 11 oros, solo superado por Estados Unidos.

Mac Neil, de 23 años, se consagró como figura mundial en Tokio-2020, donde logró un oro en los 100m mariposa y otras dos medallas, unos éxitos que también expusieron su singular historia personal.

La ocho veces campeona mundial nació en 2000 en Jiujiang, al sureste de China, y un año después abandonó el país asiático al ser adoptada por una familia canadiense.

Su victoria olímpica generó una oleada de mensajes indignados en las redes sociales chinas, que atribuían la adopción de Mac Neil a un posible abandono de sus padres biológicos motivado por la política nacional de hijo único, que el gobierno de Pekín ha ido relajando desde 2016.

"Siempre crecí como canadiense", recalcó entonces. "Nací en China y fui adoptada cuando era muy pequeña, eso es todo en cuanto a mi herencia china".

"Es sólo una parte muy pequeña del viaje hasta donde estoy hoy, y es algo irrelevante cuando se trata de lo lejos que ha llegado mi natación", subrayó.

- Parón por salud mental -

Mac Neil se crió con su familia adoptiva en la ciudad canadiense de London (Ontario, sureste), próxima a la frontera con Estados Unidos, donde empezó a nadar con dos años.

A los ocho ya participaba en competencias y a los 15 comenzó a representar a Canadá internacionalmente.

Su irrupción en los grandes escenarios ocurrió en el Mundial de natación de 2019 en Gwangju (Corea del Sur), donde dio la sorpresa al conquistar el oro en los 100m mariposa por delante de su gran ídolo, la sueca Sarah Sjöström, monarca olímpica y cuádruple campeona del mundo.

Desde entonces ha acumulado otras siete medallas de oro así como los récords mundiales de los 100m mariposa y los 50m espalda en piscina corta, territorio en el que enfocó sus esfuerzos por los problemas de asma severa que ha tenido que sobrellevar a lo largo de su carrera.

Al igual que otros deportistas de élite, la nadadora resintió la presión que cargaba sobre sus hombros y en 2022 renunció a competir en las pruebas individuales del Mundial de Budapest como medida para cuidar de su salud mental.

Este año Mac Neil ha vuelto a pisar los grandes podios por sí misma con una plata en los 100m mariposa del Mundial de Fukuoka (Japón).

Ahora regresará a casa con una maleta llena de oro desde Santiago, su deseado trampolín hacia los Juegos de París del próximo año.

(L.Garnier--LPdF)