Messi y la campeona del mundo Francia esperados en Catar
Uno sueña con levantar por primera vez el trofeo más preciado del fútbol, los otros con seguir teniéndolo en sus manos: el argentino Leo Messi y la Francia campeona del mundo eran esperados entre miércoles y jueves en Catar para disputar el Mundial-2022 que comienza el domingo.
Los 'Bleus', que inician su temporada el 22 de noviembre contra Australia, son esperados a primera hora de la tarde en Catar (15h00 GMT); los argentinos en principio llegarán en la madrugada del miércoles al jueves, y una semana antes de su estreno ante Arabia Saudita.
La selección albiceleste juega esta noche un amistoso en Abu Dabi a las 19h30 locales (16h30 GMT) y una vez terminado tenían previsto viajar a Doha, con probable llegada en la madrugada.
Para el goleador del Manchester City Erling Haaland, quien verá el Mundial por televisión ante la no clasificación de Noruega, el abanico de aspirantes a conquistar la primera Copa del Mundo en un país árabe es amplio: "Los favoritos deberían ser Brasil, Argentina, Francia y quizá Inglaterra", dijo.
En Argentina, las expectativas son inmensas para unos aficionados que sueñan con ver a Leo Messi logrando al fin un Mundial, un año después de haber conquistado la Copa América en 2021. Una gesta que le permitiría acercarse un poco más a la leyenda Diego Maradona.
El interesado trata de suavizar ese entusiasmo desenfrenado entre muchos de sus compatriotas: "Iremos para pelear pero no seremos campeones de entrada como pensamos los argentinos". "Brasil, Francia e Inglaterra hoy por hoy están un poquito por encima del resto", estimó.
Menos excesos de optimismo presenta sin embargo Francia, después de las ausencias de los centrocampistas lesionados Paul Pogba y N'Golo Kanté, unos de los artífices del título de 2018, y del defensor central Presnel Kimpembe, quien causó baja el lunes.
- Bandera arcoíris -
Los 'Bleus' tienen que seguir respondiendo a las persistentes críticas en su país sobre la cuestión de los derechos humanos en Catar, procedentes de los medios pero también de responsables políticos y sindicales. ¿Servirá para apagarlas el compromiso adquirido por los 'Bleus', antes de su viaje, de dar un apoyo económico a ONG que trabajen "por la protección de los derechos humanos", recordando de paso su "adhesión" al "rechazo de toda forma de discriminación"?
El campo de entrenamiento de Estados Unidos lucirá una bandera arcoíris, la de las luchas por los derechos de las personas LGBTQ+, según anunció su entrenador Gregg Berhalter: "Hace 18 meses que hablamos al equipo de cuestiones sociales en Catar. Somos conscientes de que ha habido notables avances (...) pero aún hay trabajo por delante", afirmó.
La homosexualidad y las relaciones fuera del matrimonio son ilegales en Catar.
En la vanguardia de las críticas, los daneses, por su parte, renunciaron a lucir una camiseta de apoyo a los derechos humanos durante sus entrenamientos, como se lo exigió la FIFA. En cuanto a los australianos, a su llegada al Golfo, mostraron su intención de ocuparse en adelante "sólo de fútbol".
Las selecciones de países occidentales, donde toman más fuerza los debates, parecen decididas a no desviar su concentración más allá de lo puramente deportivo.
- Ronaldo, la crisis -
"El fútbol nos une a todos", lamenta la FIFA en un video en el que aparecen estrellas anunciadas del torneo, como el polaco Robert Lewandowski, el francés Karim Benzema o el portugués Cristiano Ronaldo.
Esperado para el viernes, el astro luso de casi 38 años disputará su última Copa del Mundo en un contexto de ruptura total con su club, el Manchester United, una entidad que le habría "traicionado", según sus propias palabras. Después de esos términos duros contra los propietarios del club y su entrenador Erik ten Hag, difícil de imaginar al quíntuple Balón de Oro regresar a Old Trafford una vez su Mundial haya concluido.
¿La incertidumbre sobre su futuro podría pesar en su rendimiento, ya de por sí lejano los últimos meses del mostrado en su mejor momento? El primer partido de Portugal, contra Ghana, un partido trampa, dará a los lusos una primera medida de sus posibilidades.
En todo caso es la última oportunidad para 'CR7'. Como para la 'generación dorada' belga, semifinalista en 2018, que voló el martes con su mascarón de proa Eden Hazard, menos temible que en el pasado.
"Estábamos en el pico de nuestra forma en 2018. Ahora yo juego un poco menos, Romelu Lukaku está lesionado, la defensa es un poco más mayor, pero estamos aquí para mostrar que la gente puede contar con Bélgica", explicó el atacante de los Diablos Rojos de 31 años.
(M.LaRue--LPdF)