Pekín fustiga el veto de EEUU a la tecnología china en los vehículos conectados
Pekín fustigó este miércoles la decisión del gobierno estadounidense de prohibir la venta de vehículos conectados que integren tecnología china, y afirmó que la supuesta amenaza a la seguridad nacional alegada por Washington no está justificada.
Washington anunció el martes la medida, que también concierne la tecnología rusa, después de que el Departamento de Comercio lanzara en septiembre una investigación pública al respecto.
La prohibición anunciada será aplicada de manera progresiva, y comenzará en 2027 para el software y en 2029 para los equipamientos provenientes de dichos países, precisó el Departamento de Comercio.
"Este tipo de acciones perturban la cooperación económica y comercial entre empresas (...) y representan un proteccionismo típico y una coacción económica", dijo el portavoz de la cancillería Guo Jiakun. "China se opone firmemente a esto", enfatizó.
"Los autos no son más simplemente acero sobre ruedas, son computadoras. Tienen cámaras, micrófonos, dispositivos GPS y otras tecnologías conectadas a internet", explicó el martes la secretaria de Comercio saliente, Gina Raimondo.
"Con esta decisión, el Departamento de Comercio establece las reglas necesarias para proteger la vida privada de los estadounidenses y la seguridad nacional, al mantener lejos a nuestros adversarios y su capacidad de manipular estas tecnologías para acceder a informaciones sensibles", añadió.
Actualmente, ningún auto conectado chino se vende en Estados Unidos, si bien el fabricante BYD vende autobuses en California que no estarán incluidos dentro de la prohibición.
Algunos fabricantes occidentales como Volvo, un grupo sueco controlado por la china Geely, así como Polestar, Buick (de GM) y Lincoln (filial de Ford), venden vehículos de origen chino en el mercado estadounidense.
Por su lado, Tesla, la empresa del magnate Elon Musk, futuro ministro del próximo presidente Donald Trump, produce en China vehículos eléctricos destinados a exportación.
"Amparándose en la llamada seguridad nacional, Estados Unidos restringe el uso de software y hardware chino para vehículos conectados, así como vehículos enteros sin ninguna base factual", dijo también el portavoz en una rueda de prensa.
(V.Castillon--LPdF)