Coppola estrena por fin su épica "Megalópolis" y divide a Cannes
"Megalópolis", la esperada película de la leyenda del cine Francis Ford Coppola, una obra monumental gestada durante años, se estrenó finalmente este jueves en Cannes, donde compite por la Palma de Oro.
¿Una obra maestra o una historia confusa? La prensa apareció dividida antes, durante y después de la gala oficial, que reunió en la alfombra roja a una plétora de estrellas de Hollywood, capitaneados por el protagonista, Adam Driver.
Arropando al maestro aparecieron Jon Voight, Shia Labeouf, Laurence Fishburne y Aubrey Plaza, entre otros.
El veterano director llegó con sombrero de paja y un bastón en la mano, del brazo de su nieta, Romy Mars, hija de la cineasta Sofia Coppola.
Algunos periodistas que asistieron a proyecciones previas silbaron, otros aplaudieron, pudo comprobar la AFP.
Al final de la gala oficial, el filme de más dos horas, fue aplaudido, pero sin excesivo entusiasmo.
"Megalópolis" cuenta los esfuerzos de un ambicioso arquitecto para hacer renacer Nueva York, ante la oposición del alcalde.
Pero en realidad Coppola, de 85 años, esboza la historia como una parábola: Nueva York como la Roma republicana, Estados Unidos como un Imperio en decadencia.
Las alusiones a la historia clásica del Imperio romano son constantes, en particular a la historia de Catilina, un político con una sangrienta reputación que vivió entre 108 y 62 a. C.
Y también hay préstamos de monólogos de Shakespeare, algo de latín, combates de gladiadores, reflexiones sobre la historia norteamericana, números musicales y un truco inesperado, una triquiñuela que solo podía sacar del sombrero un genio, y que hace de "Megalópolis" una película realmente difícil de distribuir en todo el mundo.
La prensa especializada en Hollywood reportó la perplejidad de distribuidores que pudieron ver la película antes de Cannes.
Y a pesar de ello, la cadena de cines Imax, especialista de las pantallas de gran formato, anunció este jueves que está dispuesta a presentarla en todo el mundo.
"No hay nada más terrible que una película pretenciosa. Una película que aspira a algo realmente grandioso y no lo logra es una mierda, es basura", dijo hace casi medio siglo Coppola en una entrevista en la selva, mientras filmaba "Apocalypse Now", su obra maestra de 1979.
"Pero lo que me digo, al fin y al cabo, es: al carajo. No me importa si es pretencioso, o si no lo es (...). Lo único que sé es que voy a ver esa película", sentenció.
- Nada a medias -
Coppola es un cineasta que no hace las cosas a medias.
Para "Megalópolis", el director tuvo que hipotecar parte de sus propiedades. El presupuesto de la cinta fue de unos 120 millones de dólares, según la prensa especializada.
Coppola aseguró que llevaba 40 años pensando en esta obra, que ha reescrito varias veces.
"Diría que es la película más ambiciosa en la que he trabajado, más que 'Apocalypse Now'", dijo el director.
Hace un mes, Coppola perdió a su esposa, Eleanor, su apoyo inamovible durante más de seis décadas, y el director le dedicó este proyecto, que podría ser su canto de cisne.
- Un momento de nostalgia -
Cannes vivió un momento de nostalgia que es una constante en esta 77ª edición, puesto que a Coppola lo acompañan, en competencia o no, varios maestros de su generación.
Paul Schrader, autor de "American Gigolo", presenta el viernes a sus 77 años "Oh, Canadá", que protagoniza también Richard Gere.
George Lucas, que acaba de cumplir 80 años, será objeto de un homenaje especial y recibirá una Palma de Oro honorífica, como ya sucedió con Meryl Streep, de 74, en el inicio del certamen.
Otro maestro, George Miller, el padre de "Mad Max", presentó el miércoles, fuera de concurso, "Furiosa", otro capítulo de este éxito de ciencia ficción.
Coppola ganó su primera Palma de Oro en 1974 con "La conversación", su segunda con "Apocalypse Now" en 1979.
Su leyenda no es solamente visual. Coppola forma parte de una generación que cambió la forma en que se financiaban las películas respecto a la época de los grandes estudios.
"Como cineasta y showman, Coppola siempre ha apuntado alto [...] Ha desafiado la lógica de su carrera", explicó a la AFP el veterano periodista de cine estadounidense Tim Gray.
"Me parece admirable que este hombre de 85 años se comporte como un cineasta independiente, como un artista que quiere venir a mostrar su trabajo. Cannes es importante para él y él es importante para Cannes", aseguró Thierry Frémaux, delegado general de la muestra.
(M.LaRue--LPdF)