El grupo de expertos de la ONU volverá a alertar sobre la catástrofe climática
Los expertos de la ONU sobre el clima volverán a plantear el lunes en su nuevo informe una imagen sin dudas catastrófica de los impactos sobre la humanidad de un cambio climático que se acelera a pesar de los reiterados llamamientos a reducir rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
Tras dos semanas de negociaciones en línea y a puertas cerradas que se extendieron más de un día de lo planeado, el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas (IPCC), revelará a las 11h00 GMT el "resumen para quienes deciden" revisado línea por línea, palabras por palabra, por los 195 Estados miembros.
Es una suerte de condensado políticamente sensible de miles de páginas del informe científico elaborado por 270 investigadores de 67 países.
Incluso si esta publicación corre el riesgo de verse eclipsada por la invasión rusa de Ucrania, "el informe tiene que ir más allá de la cuestión de las portadas de los diarios", subrayó ante la AFP Stephen Cornelius, observador de las negociaciones para la oenegé WWF.
"Va a apuntalar las políticas internacionales y nacionales para lo próximos 6 o 7 años", hasta el próximo ciclo de evaluación del IPCC, agregó.
"Sus conclusiones serán de una importancia capital para quienes deciden en el mundo entero", había insistido también el presidente del IPCC, Hoesung Lee, durante una breve sesión pública para el lanzamiento de la sesión a mediados de febrero. "Las necesidades nunca fueron tan importantes, porque los desafíos son más elevados que nunca".
"El futuro es ahora", afirma de su lado Alexandre Magnan, un de los autores del informe.
La temperatura del planeta aumentó una media de +1,1 °C desde la era preindustrial, y el mundo ya tiene ante sus propios ojos en casi todos los continentes las catástrofes en acción. Como el año pasado con los terribles incendios en el oeste de Estados Unidos, Grecia o Turquía, las lluvias torrenciales que inundaron regiones de Alemania o China, o un termómetro que rozó los 50 ºC en Canadá.
Y esos fenómenos meteorológicos extremos se van a volver cada vez más frecuentes con la continuación del calentamiento global.
En la primera parte de su informe publicado en agosto pasado, los expertos del IPCC estimaron que para 2030 -es decir diez años antes de los pensado- la temperatura alcanzaría el umbral de +1,5 °C, el objetivo más ambicioso del Acuerdo de París.
Antes de un tercer capítulo previsto para en abril sobre las soluciones para reducir las emisiones de gases de afecto invernadero, el segundo publicado este lunes se centra en los impactos del calentamiento global y la forma de prepararse para limitar los riesgos ("la adaptación").
El texto debe enumerar las consecuencias presentes y por venir en todos los continentes y en todos sus aspectos: salud, seguridad alimentaria, escasez de agua, desplazamiento de poblaciones, destrucción de los ecosistemas...
- "Adaptarse, necesidad vital" -
Pero también evaluará el estado de nuestra preparación para estas consecuencias devastadoras, mencionando las medidas de adaptación y advirtiendo sobre aquellas que tendrían un impacto contraproductivo.
"Adaptarse es una necesidad vital. Y lo que es muy vital es hacer la adaptación muy ambiciosa", afirma Alexandre Magnan. Quedarán a pesar de todo riesgos "inevitables", agrega, incluso si el mundo logra respetar los objetivos del Acuerdo de París bien por debajo de +2 °C, si es posible +1,5 °C.
Pero si se tiene en cuenta que cada décima de grado de calentamiento cuenta, estos riesgos residuales serán más débiles si se limita el aumento de la temperatura.
Es por ello que "la adaptación y la reducción de las emisiones tienen que ir de la mano, deben unir sus fuerzas contra el cambio climático para un futuro sustentable", pedía recientemente Hans-Otto Pörtner, copresidente del grupo del IPCC que preparó el informe.
Frente a la lista de catástrofes y la necesidad de reducir las emisiones en cerca de 50% para 2030 a fin de no superar +1,5 °C, el mundo prometió en la conferencia sobre clima de la ONU COP26 de Glasgow en noviembre acelerar la lucha contra el calentamiento global y financiar más medidas de adaptación.
Para las oenegés y la ONU esto no es suficiente. En ese contexto, hay un llamamiento a los Estados para que refuercen sus ambiciones de cara a la COP27 en Egipto en noviembre próximo.
(R.Lavigne--LPdF)