Brexit, un tema tabú en la campaña electoral británica
La salida de la Unión Europea fue el tema clave de las elecciones legislativas de 2019 en el Reino Unido. Cinco años después, el Brexit está prácticamente ausente de la campaña para los comicios del 4 de julio.
Esta ausencia no sorprende a los residentes de la estación balnearia de Skegness, al este de Inglaterra, un bastión del antieuropeísmo.
"Los laboristas evitan hablar de ello porque no querían salir de la UE, los conservadores porque no hicieron bien las cosas", resume para la AFP Danny Brookes, exalcalde de esta localidad turística un poco destartalada.
La salida de la UE, votada en 2016 y hecha realidad en 2020, dividió profundamente a los británicos, los cansó y dejó heridas que están tardando en cicatrizar.
"Es un poco como una discusión violenta en una familia. Pasa un tiempo antes de que alguien se atreva a abordar el tema nuevamente", señala Chris Grey, experto en Brexit de la Universidad Royal Holloway.
En 2019, Boris Johnson llevó a los conservadores a una victoria electoral aplastante con la promesa de "cumplir el Brexit".
En aquella ocasión, el diputado conservador por Boston & Skegness, la circunscripción que más votó en todo el Reino Unido a favor del Brexit (75% favorables a salir de la UE), fue reelegido cómodamente.
- Promesas incumplidas -
La afluencia de migrantes de Europa del Este y el descontento general por los salarios o la falta de empleo fueron esgrimidos como explicación para estos resultados en la ciudad costera de Lincolnshire.
El exalcalde de Skegness Danny Brookes, de 58 años, votó a favor del Brexit, pero cree que las promesas hechas por sus partidarios, particularmente en materia de migración, que desde entonces ha alcanzado niveles récord, no se han cumplido.
"Muchas de las cosas que dijeron no se hicieron realidad. Nos decepcionaron", critica en el café que posee en la calle principal de la localidad, refiriéndose en particular a la acogida de los solicitantes de asilo en los hoteles de la ciudad.
Otros residentes de esta localidad costera de 21.000 habitantes expresan un malestar similar.
Pete Ashmore, un jubilado de 70 años que apoyó el Brexit en 2016, votaría de manera diferente si volviera a tener la oportunidad.
"Me parecía una buena idea, pero sospechaba que no funcionaría y eso es lo que ocurrió", confiesa, mientras recorre el paseo marítimo en una silla de ruedas en la que ha colocado dos banderas británicas.
Según las encuestas, la mayoría de los británicos piensa ahora que el Brexit, sinónimo de burocracia y costes adicionales para las empresas, fue un error.
Y quienes continúan defendiéndolo creen que el gobierno conservador no lo llevó a cabo bien.
Para el gobierno conservador, que intenta permanecer en Downing Street a pesar de estar alrededor de 20 puntos por detrás del Partido Laborista, "no tiene mucho sentido hablar de ello", subraya Chris Grey.
Los laboristas, que también evitan el tema, han descartado reintegrarse en la UE.
- Relación más estrecha con la UE -
Su líder, Keir Starmer, que apoyó la permanencia y pidió una segunda votación sobre el Brexit, desea establecer una relación más estrecha con los 27 países miembros.
Pero en lugar de hablar de Europa, el Partido Laborista se está centrando en preocupaciones británicas como el poder adquisitivo o las listas de espera en el sistema de salud pública, según Grey.
En Skegness, Mandy Mann, que come un "fish and chips" (pescado con papas fritas) en una mesa en el centro de la ciudad, lamenta que el Brexit y volver a la UE, algo que ella defiende, no formen parte de los debates.
"Pagamos más que cuando estábamos en la UE", lamenta esta mujer de 55 años, que menciona las crecientes facturas de energía y los préstamos hipotecarios que hay que pagar.
Si el Partido Laborista obtiene una amplia mayoría en el Parlamento, algunos de sus representantes electos abogarán por fortalecer los vínculos con la UE.
Eso hará que el Brexit vuelva a la actualidad, predice Chris Grey, y en su opinión podría incluso permitir que se plantee la idea de la adhesión.
(E.Beaufort--LPdF)