Keir Starmer visita Irlanda del Norte con un "optimismo moderado" de unionistas y republicanos
El primer ministro británico, Keir Starmer, visita el lunes Irlanda del Norte, con expectativas entre los responsables locales de que mejoren las relaciones con el nuevo gobierno tras las tensiones generadas por el Brexit.
Unionistas y republicanos esperan que el líder laborista aporte mayor estabilidad y compromiso al territorio y encauce las relaciones con Dublín.
"Hay un optimismo moderado con este nuevo gobierno, pero por razones diferentes", según cada bando, dijo a la AFP James Pow, profesor de la Universidad Queen's de Belfast.
Tras las elecciones legislativas del jueves, el principal partido nacionalista, el Sinn Fein, conservó sus siete escaños, convirtiéndose en el partido norirlandés con mayor representación en el Parlamento británico en Londres.
El Sinn Fein superó a su gran rival unionista, el DUP (Democratic Unionist Party), que perdió tres escaños de los ocho que tenía, incluidos dos ante otros partidos de su misma ideología.
- Sinn Fein, fortalecido -
Los expertos dicen que el resultado fortalecerá al Sinn Fein, que tradicionalmente no se sienta en la Cámara de los Comunes porque se opone a la soberanía británica en Irlanda del Norte, en sus planes de exigir un referéndum o "consulta sobre la frontera" para la unidad irlandesa.
El partido, antiguo brazo político de la organización paramilitar Ejército Republicano Irlandés (IRA), ya es la fuerza con mayor representación en la asamblea local de Irlanda del Norte.
El viernes, la presidenta del Sinn Fein, Mary Lou McDonald, pidió al nuevo gobierno británico que muestre su "imparcialidad" y acepte la legitimidad de un cambio constitucional.
Pero para James Pow, sigue existiendo un reparto de votos aproximadamente equitativo entre los unionistas, apegados a la permanencia de Irlanda del Norte dentro del Reino Unido, y los nacionalistas irlandeses.
Keir Starmer y su nueva ministra encargada de Irlanda del Norte, Hilary Benn, "no se sentirán obligados a incluir en la agenda una votación sobre la frontera", añade Pow.
Históricamente, los unionistas han sido aliados del Partido Conservador británico, pero pocos lamentaron la derrota de los tories después de 14 años en el poder.
Keir Starmer "es alguien con quien tenemos buenas relaciones", dijo el líder del DUP, Gavin Robinson, al celebrar la "extraordinaria" victoria laborista.
Entre los unionistas, existe "la esperanza de que Keir Starmer pueda promover un mayor alineamiento con la Unión Europea (en materia comercial), lo que reduciría el impacto" del Brexit en el desajuste entre la provincia y el resto de Gran Bretaña, explica James Pow.
Los unionistas siguen percibiendo que las reglas comerciales posteriores al Brexit, aceptadas por el DUP después de meses de bloqueo institucional, construyen una frontera en el Mar de Irlanda entre Irlanda del Norte y el resto del Reino Unido.
- Ley controvertida -
Una de las pocas promesas concretas relacionadas con Irlanda del Norte en el programa laborista es la derogación de una controvertida ley "Legacy Act" (Ley de legado) que llevó a Dublín a recurrirla ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
La ley, una especie de amnistía sobre los delitos de sangre no resueltos cometidos en Irlanda del Norte, que entró en vigor en mayo, detuvo las investigaciones sobre crímenes de la era de los disturbios, incluidos muchos en los que supuestamente participaron fuerzas de seguridad británicas, y otorgó inmunidad a los perpetradores.
Todos los partidos esperan también que el Gobierno laborista sea "más abierto" a la hora de revisar la asignación pagada por Londres.
Para el columnista Alex Kane, residente en Belfast, Keir Starmer, que en el pasado ayudó a reconstruir la policía norirlandesa, podría aportar una mayor "armonía" a las relaciones entre el Reino Unido e Irlanda y, más en general, con la Unión Europea.
El primer ministro irlandés, Simon Harris, acogió calurosamente la victoria de Keir Starmer y aceptó una invitación a Downing Street prevista para el 17 de julio.
Ambos líderes están decididos a "reiniciar y fortalecer" las relaciones bilaterales, afirmó.
(R.Dupont--LPdF)