El primer ministro húngaro Orban se reúne con Trump tras la cumbre de la OTAN
El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, viajó este jueves a Florida para reunirse con el expresidente estadounidense Donald Trump tras finalizar la cumbre de la OTAN en Washington.
La reunión en la residencia de Mar-a-Lago de Trump probablemente aumente más el malestar generado entre los aliados europeos de Budapest por la visita de Orban al presidente ruso, Vladimir Putin, la semana pasada.
El derechista Orban, cuyo país asumió este mes la presidencia rotativa de la Unión Europea, ha sido firme partidario de Trump y ya se reunió con él en marzo.
"Discutimos formas de hacer la paz", dijo Orban en redes sociales el jueves por la noche, y acompañó el mensaje con una foto de los dos líderes reunidos. "La buena noticia del día: ¡él (Trump) lo va a solucionar!", celebró, sin dar más detalles.
Orban provocó revuelo en la UE por volar a Moscú para hablar con Putin en lo que el líder húngaro describió como una "misión de paz" sobre la guerra en Ucrania, país que visitó inmediatamente después para conversar con su presidente Volodomir Zelenski.
El bloque de 27 naciones de la UE condenó la invasión rusa de Ucrania e impuso sanciones sin precedentes a Moscú.
"Viktor Orban no tiene ningún mandato de la alianza ni de la Unión Europea para llevar a cabo ningún tipo de negociación", aclaró el presidente finlandés, Alexander Stubb, en la cumbre de la OTAN.
"Puede hacerlo por sí mismo. Pero estoy fundamentalmente en desacuerdo en hacerlo. Simplemente no veo el propósito".
Orban, al igual que Trump, se ha manifestado escéptico sobre el papel que están desempeñando los países de la OTAN en su apoyo a Ucrania y se niega a enviar armas a Kiev bajo el argumento de que hacerlo alimentaría el conflicto.
Biden fue anfitrión de la cumbre de la OTAN que terminó este jueves en Washington, donde además buscaba tranquilizar a sus homólogos (y a los votantes estadounidenses) sobre su liderazgo y aptitud para el cargo, luego del pobre desempeño en el debate televisado contra Trump el mes pasado, que reavivó las preocupaciones sobre su edad.
Biden tiene 81 años y Trump, 78.
(Y.Rousseau--LPdF)