Ucrania reivindica avances militares en la estratégica región de Jersón
Ucrania reivindicó el viernes la reconquista de decenas de localidades de la región de Jersón, una ciudad estratégica del sur del país, donde la administración de ocupación rusa está evacuando a miles de civiles para convertirla en una "fortaleza" militar.
"Región de Jersón: 88 localidades recuperadas", indicó en Telegram un consejero de la presidencia ucraniana, Kirilo Timoshenko, sin precisar cuándo fueron reconquistadas.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se congratuló por los "buenos resultados" de la contraofensiva lanzada a fines de septiembre, que permitió al ejército ucraniano recuperar territorio y apoderarse de armas y municiones de las tropas de ocupación.
El avance ucraniano en el este y el sur cobró recientemente un nuevo impulso en el flanco meridional de Jersón, la primera gran ciudad ucraniana en caer, en marzo, en manos rusas.
Según las autoridades de ocupación rusa, cuatro personas murieron, dos de ellas periodistas, durante un bombardeo ucraniano nocturno contra el puente Antonivskiy, situado sobre el río Dniéper y usado para las evacuaciones.
Ucrania negó haber apuntado contra civiles. "No atacamos infraestructuras críticas. No atacamos localidades pacíficas ni poblaciones", dijo una portavoz militar ucraniana, Nataliya Gumenyuk, en la televisión.
- "Fortaleza" -
Ante el avance ucraniano, las autoridades de ocupación rusa declararon que estaban convirtiendo la ciudad de Jersón en "una fortaleza".
También instaron a los civiles a cruzar a la margen izquierda del río Dniéper.
El jueves, el jefe adjunto de la ocupación rusa en Jersón, Kiril Stremusov, dijo que ya se habían marchado unas 15.000 personas. Su administración prevé desplazar de "50.000 a 60.000" en los próximos días.
El secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Oleksiy Danilov, afirmó que esas evacuaciones son en realidad una "deportación masiva" que busca cambiar "la composición étnica del territorio ocupado".
- Represa minada -
En la misma región, Ucrania acusó a las fuerzas rusas de haber colocado minas en la represa de Kajovka, para provocar una "catástrofe".
Si la represa explota, "más de 80 localidades, entre ellas Jersón, se encontrarán en la zona de inundación rápida", advirtió Zelenski.
"Esto podría destruir el suministro en agua de una gran parte del sur de Ucrania" y afectar el enfriamiento de los reactores de la central nuclear de Zaporiyia, que obtiene su agua en ese lago artificial de 18 millones de metros cúbicos, agregó.
El primer ministro ucraniano, Denys Chmygal, pidió el viernes el envío "inmediato" de una misión de observación internacional para la represa.
En los últimos días, Rusia tomó por blanco de sus bombardeos las centrales energéticas de Ucrania, obligando al país a restringir el consumo de electricidad.
- Compromiso "inquebrantable" -
En el frente diplomático, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, mantuvo una conversación telefónica con su par ruso, Serguéi Shoigu, en la cual le instó a mantener todos los "canales de comunicación" abiertos respecto a la guerra en Ucrania.
Fue la segunda llamada entre ambos funcionarios desde que Moscú invadió Ucrania el 24 de febrero. La anterior databa del 13 de mayo.
Austin también le reiteró a su homólogo ucraniano Oleksiy Reznikov, el compromiso "inquebrantable" de Estados Unidos de seguir apoyando a Ucrania, informó el portavoz del Pentágono.
La Unión Europea (UE) anunció que prepara un plan de ayuda económica para Ucrania de 1.500 millones de euros mensuales (montante similar en dólares), a partir de 2023.
Zelenski acusó a Rusia de retrasar "deliberadamente" la exportación de cereales desde los puertos ucranianos hacia países de África y Asia.
Ucrania también expresó su temor de que Rusia abra otro frente desde el territorio de Bielorrusia, un país aliado de Rusia.
Pero el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, aseguró este viernes que a su país no le "hace falta" una guerra.
Irán ya fue blanco de sanciones de los occidentales por haber entregado esos aparato a Rusia, aunque tanto Teherán como Moscú niegan cualquier tipo de cooperación de ese tipo.
(M.LaRue--LPdF)